martes, noviembre 18, 2008

il maldito cuore...



La situación es la siguiente: creo que tengo un atisbo de sentimiento por alguien.
Y me descoloca, por completo; no está dentro de mis planes, no tengo tiempo...o tal vez me lo podría hacer, pero me he negado todo el año a pasar por esto, porqué ahora?

Pero no saco nada con cuestionarme sobre cosas cuya respuesta sé que no la tengo y no la voy a tener nunca, y ese es el dilema con esto de tener "sentimientos" y cosas por alguien: que uno no los puede controlar.

Si fuera por mí, en este momento los dejo en stand by, y sigo con lo mío, bien cuadradita, como caballo de carrera...pero para que andamos con cosas...hace tiempo que no estaba en esta situación, como de que "me guste" alguien, aunque no sea tan así ahora, pero es algo, y es raro, porque no es siempre, es como que a ratos me gusta harto y después no me gusta mucho, pero me sigue simpatizando, y prefiero que sea así, que mantengamos una relación "simpatizante", por harto tiempo, y tener instancias agradables y no quedarse en eso del joteo y la calentura de sopa.

Me siento como pendeja, como de 7° básico, cuando andas con mariposas en la guata porque te gusta alguien, incluso el mismo término, decir que me "gusta" alguien, me carga, como que no me representa ahora, me queda grande todavía...pero no encuentro otra palabra, así que quedo en las mismas.

Entonces, tarea para la casa: ¿que palabra define mi estado? hay dias que me agrada más que otros, cuando no sé de él por un tiempo empiezo a pensar que qué será de él (en este punto, ya me asusto), cuando sé de él a veces se me hace una sonrisa media huevona en la cara, y otras veces no reacciono, pero últimamente, despierta más reacciones en mí de las que yo esperaba, y es eso me descoloca.

Acepto sugerencias.

6 comentarios:

seferene dijo...

Supongo que todas las personas son distintas en estas cosas, pero yo creo que los sentimientos SI se pueden manejar, más aún cuando están en estado tan larvario. A veces, cuando hemos estado mucho tiempo solas o sometidas a cierta disciplina, es como que nuestro inconsciente busca emparejarse a toda costa, más allá de si nuestra conciencia lo desea o no.Y claro, también están estas traviesas hormonas que nos pasan la cuenta.
Inconsciente y hormonas, nada de cuore veo yo a estas alturas...al menos eso es lo que me pasaba a mí en situaciones como la que comentas.
¿qué hacer? pues si tienes la capacidad de no meter el corazón da lo mismo lo que hagas. Sin autotrampearse.
Si no puedes mantener el corazón desapegado pues hay dos opciones, la mía suele ser darle tiempo al tiempo (con un límite), la otra es arriesgarse a que se te hagan trizas las trizas.

....no hay receta...

Lilith dijo...

Si, hay harta razón en lo que escribes, creo que optaré por el tiempo, no estoy dispuesta a pasar por el juego de las trizas otra vez.
Inconsciente y hormonas, ya tuve mis paseos por esos lugares este año =), sólo que ahora me pasa la cuenta el tiempo, y como tu dices, me cuesta mantener el corazón desapegado.

Anónimo dijo...

Como dicen en PAPÁ POR SIEMPRE...
"Una vez que el padre de tus hijos sale de tu vida no te queda otro destino que la castidad más absoluta".

Ya, sin poner esa cara. Si igual es gracioso, una vez bien pensado.

Estaba escribiendo en el "otro blog" y cuando iba a comenzar el segundo párrafo, el mensaje se fue, incompleto. Decía una cosa así (idea 100% mía digna de frase para el bronce): "El problema de poner el cuore a los pies de alguien, es que te lo pueden pisotear y luego limpiárselo como caca en el pasto".

Preferí dejarlo así y no hacer "doble comment", total a efectos del nuevo/ahora_si_que_si/habran_paso_que_por_fin_voy_a_empezar/esta_vez_es_en_serio comienzo anunciado en "el otro" blog se ve perfecto y hasta acompaña el tono.

Pero acá me voy a explayar al respecto.

¿Tienes miedo de que tu cuore sea la caca en la zapatilla de alguien? Pues entonces resístase a ser pisoteada. Imagínese una caca a la que de pronto le salen brazos y detiene el pie, empujando al agresor hacia atrás. La fortaleza para eso ya está. Lo malo es que la ocupas en esconderte, en "pasar desapercibida", en fingir que reprimes la primavera en la guata. No hace falta ser Corín Tellado para saber que mientras más uno se esfuerza en ignorar al objeto de la atracción, menos se consigue hacerlo.

Pues eso. Y hablando las cosas pan-pan-vino-vino, yo creo que la fortaleza para resistir un desamor está. Y si má encima resulta no ser un desamor... ¿ah?





¿ah?

seferene dijo...

Salinger, me extraña!! le das a la atracción un poder sobrehumano y no lo tiene, depende de nosotros si la dejamos actuar o no.Está dentro de nosotros, nosostros la creamos, no es un bichito que viene bajando de una nave espacial y se te mete en el cuerpo sin que le demos permiso.
Ese corintellanismo de que "mientras más te esfuerzas en ignorar el objeto de tu atracción menos consigues hacerlo" no es digno de ti, Salinger. Y además de ser indigno no es cierto.

Anónimo dijo...

Vamos, Sefe, los sentimientos *TIENEN* poder sobrehumano. Un mismo sentimiento puede sacar lo mejor y lo peor de nosotros. Ningún otro evento en la vida lo hace.

Quien intente escapar de su influjo sólo se está mintiendo a sí mismo. Porque claro que es necesario controlar los sentimientos, si creemos que "será lo mejor". Y probablemente funcione. No he dicho lo contrario.

Lo que reafirmo con seguridad dada por experiencias propias y ajenas, es que las atracciones sólo pueden ser vencidas cuando no hay que hacer un esfuerzo en demasía por ignorarlas. Es decir, sostengo que mientras más uno se esfuerza en ignorar al objeto de la atracción, menos se consigue hacerlo y agrego que, al contrario, si cada día es menos el esfuerzo por "no pescar" (existiendo aún la atracción), entonces la batalla contra los sentimientos será ganda. Hago notar que el mentirse a uno mismo es ese "esfuerzo" del que hablo.

Hay dos clases de personas en cuanto a sentimientos.

Los "No, no... bueno ya"
Y los "No, no y NÓ"

Me pregunto quién es más feliz.

En serio me lo pregunto.

Lilith dijo...

Chuata, fuertes comentarios, para bien o para mal a mi me pasa mas lo q describe Salinger, y por lo mismo intento no reprimir tanto el sentimiento cuando está, pero tampoco lo dejo salir mucho, por miedo no más.
En todo caso, el tema no deja de ser complicado, ni cuando lo limitamos a quedarse en puras hormonas, jamas deja de ser complicado, y acá hago un mea culpa porque yo me creía capaz de dar rienda suelta a mis hormonas cada tanto tiempo y seguir como si nada, pero es imposible!
Entonces me pregunto si a estas alturas será mejor reemplazar el cuore por las hormonas, y dejar que fluyan, pero bien de a poco, las cosas esas que se llaman sentimiento.